La Federación Aguere, en el ánimo de contribuir a la mejora de la sociedad, junto con la Universidad de La Laguna en el marco de los proyectos comunitarios. Está realizando talleres de diagnóstico de la Convivencia en los barrios del municipio.
Es una satisfacción recibir cartas de las vivencias de esos Talleres como la que nos ha enviado recientemente Carmen Luisa González, presidenta de la Asociación de vecinos Benchomo.
Cuando me comentaron, por parte
de la FAV Aguere, llevar a cabo un Taller de Convivencia Vecinal en la
Asociación de Vecinos Benchomo (Centro. Ciudadano Las Mantecas) no me lo pensé
dos veces. Como Presidenta actual del Colectivo, siempre he pensado que este
tipo de actividades enriquece a todos los que participamos en él y nos ayuda a
entender y a conocer un poco más los recovecos de nuestro Barrio, por lo que no
dude en darle un rotundo sí en la primera toma de contacto. Las tres Universitarias
asistentes también y los otros miembros de la Junta Directiva de la AAVV
también estuvieron de acuerdo en realizarlo.
Fue en los días posteriores, ya a
poco de comenzar, cuando empiezas a tener tus dudas en cuanto a lo de “si va a
ser bien acogido o no y vaya chasco si no aparece nadie”…
Este tipo de talleres, que no
solo se han realizado en este Colectivo, se están llevando a cabo para una vez
terminados sirvan de base para el proyecto de la Ordenanza Municipal de
Convivencia de nuestro Municipio, por lo que pienso que la ignorancia del por que
y para que se hacen influyen en la asistencia a los mismos.
Llegando al día de comienzo
empiezan tus dudas, no con lo que tú crees o con lo que puedas ofrecer desde tu
Colectivo, sino con lo que muchas de las personas que viven en el Barrio
aparentemente comentan…”Que para que va a servir”…”que total, eso no va a
arreglar nada”…”yo, ni me molesto, ni caso me van a hacer”…”paso de ir”…”¿hay
paella?”…”yo no lo organizo y no tengo tiempo de ir”…”a mí nadie me ha avisado”…y
así un largo número de comentarios que te van poniendo en un estado de nervios
y de ansiedad del que parece que no puedas salir. Pero llega el primer día de
los Talleres.
Te sorprende como la gente que
aparece, aunque poca, es tan participativa y con tanta información que valdría
la pena realizar este tipo de actividades semestralmente. Hablan, comunican los
problemas e incidencias de la parte de la comunidad donde residen, reivindican,
comentan lo que han realizado individualmente, expresan sus inquietudes,
valoran positivamente o no lo realizado por sus representantes vecinales, te
dicen cual sería su posible solución a lo que ocurre…En definitiva, te das
cuenta que funcionan este tipo de actividades.
Las universitarias encargadas de
este Taller estaban implicadas desde el primer día, aunque supongo que desde
hace mucho tiempo y aún hoy lo estén. Excelentes comunicadoras y gestoras de un
dialogo entre Vecinos, aportando conocimiento e ideas para la convivencia; que
al final es de lo que se trataba. Esmeralda, Dácil y Vanesa…Gracias¡¡
Con sus aportaciones, y sobre todo las de los vecinos
que asistieron, se dieron cuenta todos de algo que decimos siempre en las
asociaciones que trabajamos en cualquier ámbito y medida para los demás: Que
desde el Grupo, desde el Colectivo (da igual si se llama asociación vecinal o
no) se actúa mejor y más eficazmente que desde la individualidad.
No se comunica un problema mejor
haciéndolo solo que teniendo a tu vera a otros que tienen o sufren la misma
incidencia. Y por descontado, no se busca la solución igual ejerciendo solo una
voz que hablando desde la colectividad. Algo que se llama Participación se vio
reflejada en estos dos días en los que se llevaron a cabo estos Talleres.
Se descubrieron (no encuentro sinónimo que usar) los principales “problemas” en la zona; el menudeo y trapicheo de
drogas como primero, los perros llamados peligrosos y sus dueños como segundo y
los ruidos y problemas de tráfico como tercero…Hay muchos más, pero había que
poner título y los que menciono son los que más emergían de los papelitos de
colores colocados en el mural y de los que más hablaban los contertulios…
Al final, el último día, cuando
llega el descanso con el cortado y te entregan el diploma de asistencia a las
Jornadas, al menos yo me siento satisfecha (y menos nerviosa). Y también lo veo
en las caras de las jóvenes organizadoras. Los vecinos han venido dos veces al
Taller y preocupados por ver los resultados. Están encantados con los diplomas
y contentos porque han visto que no se ha perdido el tiempo, que no se han
aburrido, que no era un rollo el asistir, que sus representantes vecinales les
escuchan, que esto de venir y decir sus cosas al igual arregla algo…
Espero que otra vez, La FAV
Aguere, me diga algo para realizar otros Talleres en la Asociación. Comentarles
que ha sido algo tremendamente positivo y enriquecedor para todos, para la
AAVV, para los organizadores, para los participantes. Y para otros a los que
les comenten la posibilidad de realizarlos, decirles que no se lo piensen, que
lo hagan. Vale la pena ¡¡
Solo una cosa, espero no pensar
antes de decir que si a una actividad que me parece excelente para mis vecinos y para el colectivo que
represento. ¡¡ Aunque pase nervios, el cortado con los vecinos siempre sabe bien
¡¡
Carmen Luisa González (Presidenta
AAVV Benchomo)
No hay comentarios:
Publicar un comentario